
Proyecciones del Trigo en Argentina: Calidad Molinera y Rendimientos
El trigo es un pilar en la agricultura argentina. Analizamos las proyecciones en cantidad y calidad molinera para la próxima temporada, considerando factores climáticos y de mercado.
Introducción
El trigo es fundamental para la agricultura argentina, no solo por su contribución económica, sino también por su impacto en la seguridad alimentaria. Con un área sembrada que supera los 6 millones de hectáreas, las proyecciones para la próxima temporada son cruciales para productores y exportadores.
Proyecciones de Cantidad
Según el último informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, se espera una producción de trigo de aproximadamente 19 millones de toneladas para la temporada 2023/2024. Esta cifra representa un aumento del 5% respecto a la campaña anterior. Factores como la mejora en las condiciones climáticas y el acceso a semillas de mayor rendimiento son determinantes en esta proyección.
Calidad Molinera
La calidad molinera del trigo argentino ha sido un tema de discusión constante. En la última campaña, se observó un incremento en el contenido de proteína, alcanzando un promedio del 12%. Sin embargo, las condiciones climáticas adversas, como las lluvias excesivas durante la cosecha, podrían afectar negativamente la calidad del grano.
Factores Influyentes
- Clima: Las lluvias adecuadas durante el período de crecimiento son esenciales para un buen rendimiento. Se espera que el fenómeno de La Niña disminuya, lo que podría mejorar las condiciones hídricas.
- Tecnología: La adopción de nuevas tecnologías, como semillas resistentes a enfermedades y sistemas de riego eficientes, juega un papel crucial en el aumento de la productividad.
- Mercado: La demanda internacional de trigo argentino sigue en aumento, impulsada por los mercados de Asia y África. Las políticas de exportación favorables también han contribuido a este crecimiento.
Conclusiones
Las proyecciones para el trigo en Argentina son optimistas, tanto en cantidad como en calidad. No obstante, es fundamental que los productores continúen adaptándose a las nuevas tecnologías y prácticas sostenibles para maximizar los rendimientos y la calidad del grano.
Florencia De Stefano, Periodista de Modo Agrario.